El cazador y la Reina del hielo. [Crítica]

Siempre se ha dicho que segundas partes nunca fueron buenas. A veces simplemente se quedan un poco escasas o cortas en comparación con sus primaras entregas. Tal es el caso de Las crónicas de Blancanieves, el cazador y la reina del hielo. Pese a ser una bonita película con unas gráficas impresionantes y una buena historia, esta entra muy en contra parte con la primera entrega. Comenzando por ser la malvada bruja y el cazador los unos enlaces con la primera entrega, el resto podría apuntar a ser una película completamente distinta.

Esta segunda entrega guarda una historia que se está viendo muy contada últimamente. Ya es bastante famosa la adaptación de la Reina del hielo, que se ha visto representada en dibujos y ahora en imagen real. Esta vez se ha aprovechado la imagen de una historia ya hecha para enlazar le principio de una historia con el final de la misma, pasando en medio los hechos de La leyenda del cazador. Esto da en parte solidez a la película pero la hace también parecer una mera forma de conseguir más beneficios, es decir no es una película necesaria, pero como tal está casi a la altura de su predecesora.

Charlize Theron y Chris Hemsworth siguen siendo los eternos rivales que lucharan entre ello esta vez por unos intereses no tan lejanos a los primeros. La malvada bruja, derrotada en la primera entrega ahora ha corrompido el corazón de su hermana y esta, la hará volver a la vida, pudiendo así esta llevar acabo su venganza. Emily Blunt, la preciosa reina del hielo sin embargo tendrá otros intereses. Traumatizada por la muerte de su hijo, está a estado entrenando un ejército que a diferencia de los intereses de su hermana, quiere como hijos suyos. 

Son muchas conquistas, pero esta reina helada no quiere el reino de Blancaniebes ni formar parte de una guerra. Tan cual como es al principio, la reina del hielo niega los sentimientos en su reino, y es aquí donde se devela la verdadera historia del Cazador y su amada muerta. Dos jóvenes, entrenados por la reina del hielo, decidieron amarse, y al ser algo prohibido, fueron condenados. Odio, reproches, venganzas, todo forma parte de la misma espiral de desgracia que llevara a unos a enfrentarse contra otros en busca de una respuesta.

Como es habitual en estas películas, los efectos especiales son lo que más llaman la atención, son perfectos, realistas y muy bien realizados a la vez que integrados en la película. La banda sonora hace un buen trabajo, pero no es tan llamativa como en otras ocasiones. El reparto es bastante bueno, pero el único enlace con los espectadores es la presencia de los dos actores con más renombre, los ya mencionados arriba, por los cuales muchos decidieron ir a ver la película. Sorprende, no mucho, pero si es interesante y gusta por su argumento. Pese a que algunas cosas carecen de sentido, otras están justificadas, por lo que esta película se lleva el aprobado además de una muy buena impresión por nuestra parte.