Objetivo: Washington D.C. es la última película de Ric Roman Waugh lanzada a los cines en el mes de agosto. Forma parte de la trilogía compuesta por Objetivo: la Casa Blanca y Objetivo: Londres, dos películas que han sido gratamente recibidas por los cinéfilos amantes de la acción y el cine de pura acción.
Ahora, esta tercera entrega pone un aparente punto y final a la historia de Mike Banning (Gerard Butler), un agente del Servicio Secreto que se encarga de la protección del mismísimo presidente. En esta ocasión, nuestro protagonista tendrá que pelear contra la misma organización para la cual trabaja.
Durante un agradable día de pesca, el presidente y el sufren un ataque que deja al actual presidente Allan Trumbull (Morgan Freeman), en un coma del cual no se sabe si saldrá con vida. Todo el equipo de Mike ha sido destruido y el, como único superviviente es acusado de haber planeado dicho atentado contra el presidente de los Estados Unidos.
Esto, obligara al hombre a huir, esconderse y tratar de esconderse de todos aquellos que quieren su cabeza. Esto lleva al hombre a tener que buscar a la única personas que antaño también traicionó a su país y a su familia, Clay Banning (Nick Nolte) su propio padre. Finalmente, este hombre tendrá que pelear contra todo pronóstico y hacerle ver a todos que él no ha traicionado al presidente, que es la única opción que tiene para salvarle y que deben aprender a confiar en él y desconfiar incluso de las personas a las cuales creía sus amigos.
Esta historia aparentemente parece ser el punto final de esta trilogía ya que desde el primer momento vemos aun Mike más diferente. Este, ahora padece de repetidas migrañas que finalmente terminan por hacerle ver que no puede seguir desempeñando el papel que hasta el momento ha tenido. Por ello mismo, el presidente quiere ascenderle, pero las dudas del hombre no le permiten seguir adelante. Finalmente parece que esta es la mejor opción para cerrar toda esta historia de acción.
La acción está asegurada por completo, contando con numerosas escenas de acción acorde a las dos entregas anteriores. Recordemos que ya desde la segunda entrega, la acción se trasladó desde el interior de un edificio al exterior, contando con la acción en toda Londres. Ahora, nuevamente el ataque es directamente hacia los Estados Unidos algo que no concuerda demasiado con el título de la entrega, originalmente llamada Ángel Has Fallen, lo cual hace referencia al ángel guardián que es el protagonista de la película.
No obstante titular la película Objetivo: Washington D.C. es un poco ambicioso a la para que ciertamente oportuno. Es cierto que se ataca directamente al presidente y eso es un ataque directo hacia él es todo, pero este, no es el tema principal sobre el cual versa la historia, sino más bien como su título inicial indica, la caída o ataque que recibe el agente de seguridad del presidente, Mike Banning. Pasando por alto este pequeño detalle la historia finalmente nos muestra lo que parece ser un punto y aparte.
Esperamos no obstante que eta historia efectivamente haya llegado a su final ya que en el fondo es una forma más de alargar lo que en el fondo ha sido una historia cargada de acción, pero en términos realistas no demasiado destacable. Disfrutar de películas como esta, de acción continua y nervios continuos sobre lo que será el ultimo capitulo, es algo entretenido. La historia de Mike Banning, como agente del servicio especial ha terminado, ¿veremos ahora como continua esta historia tras su ascenso? Solamente el tiempo lo dirá.
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