Acción, intriga, muchas vueltas y un poco más de lo mismo que llevamos viendo desde que añadieron las últimas películas de Misión Imposible. Ahora, con su última entrega Tom Cruise nos demuestra que estas películas siempre seguirán partiendo de la lista base y que nada impedirá que el FMI siga existiendo y llevando a cabo sus misiones más arriesgas y peligrosas.
Una vez más Ian se ve entre la espada y la pared cuando empieza a haber problemas con el Sindicato, una organización que no se ha disuelto aún. Por si fuese poco ahora muchos le creen de nuevo un agente doble y nuevamente tiene que tener cuidado con lo que hace y lo que deja de hacer. Pese a todo él logra nuevamente salir impune pero no sin antes tener que arriesgarse y confiar en su equipo, como siempre ha hecho.
La historia principal se basa en el Sindicato de nuevo, e Ian junto con su grupo debe evitar que un arma nuclear caiga en manos de sus enemigos. Una vez más, Ian solo se podrá apoyar en su equipo, por el cual una vez más daría la vida, algo que demuestra en esta película nuevamente. Cuando Ian es considerado una amenaza entra en juego un nuevo peón, alguien que tiene que vigilarle. Además de eso, la cosa se complica cuando Solomon Lane, entra en juego y la figura de una antigua espía que se creía dentro de nuevo de su país, continúa jugándose la vida para mantener el puesto recientemente recuperado.
Esta película tiene muchos golpes de acción, así como de humor, un humor que ya estamos acostumbrados a ver y que resulta ciertamente intuitivo. No obstante Misión Imposible, desde hace un par de películas, se basa en la acción y en el riesgo, más que en una historia profunda: cuanto más arriesgado sea algo y más peligroso parezca, más va a llamar la atención del espectador para ir a ver dicha película.Y lo cierto es que una vez más, lo han conseguido. En su antigua secuela fue la llamativa y supuesta muerte de mismo Ian, luego resucitado.
En este caso la acción de basa en el nuevo caso del Sindicato, en la posibilidad de volver a la acción y una vez más disfrutar de esos momentos de tensión en la que no sabemos si un personaje finalmente va a morir, o a quedarse vivo después de todo el sufrimiento generado. En referencia a esto decimos que hay personajes que nos gustan mucho y que siguen teniendo "mucha suerte".
En cuanto a interpretaciones nuevamente encontramos a Ian como el mejor hombre de la FMI y contra el cual siempre irán (si no, la película no tendría sentido ¿no?). Las figuras de Ving Rhames, interpretando de nuevo a Luther y Simon Pegg a Benji, son de nuevo gratas de ver, recordándonos el reparto que veníamos teniendo desde hace dos películas. Jeremy Renner por el contrario no ha aparecido en esta entrega, pero esperamos volver a verle en alguna de las siguiente. Nuevamente Rebecca Ferguson, interpreta a Ilsa, es el mayor dolor de cabeza de Ian, una mujer que necesita de nuevo cumplir su misión y que pronto se unirá al grupo. Henry Cavill, conocido por ser el actor que da vida a Superman, es un actor que se queda un poco grande para este personaje según nuestra opinión, pero cuya interpretación es bastante fiel y buena, lo cual no difiere del hecho de que verle en el papel es sumamente extraño para muchos.
En resumen, Misión Imposible Fallout es una película entretenida, con una historia que arrastra desde su entrega anterior y a la cual está bastante bien unida. Eso hace que pensamos, ¿que más les queda por mostrarnos? Ahora empiezan a repetir algunos aspectos que ha hemos visto y pese a ello muchos están deseando contar con una entrega más. Misión imposible siempre ha sido y serán películas que nos hacen ver que lo imposible, con Ian Hunt, pasa simplemente a ser difícil. La verdadera pregunta es, ¿cuánto tiempo podrá continuar Tom Cruise con este tipo de películas?
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