Dante's Inferno [Los nueve círculos del infierno]

Nada más entrar en el vestíbulo del infierno nos encontramos con Virgilio, quien no irá contando todo lo que ocurrirá a continuación en los nueve círculos por los que tendremos que ir descendiendo. Si comparamos en juego con la obra de la Divina Comedia, es un lujo poder contar con un videojuego que la narre con tanta fidelidad y es el echo del primer detalle encontrado en el poeta Virgilio. Antes de entrar completamente al infierno, Dante y su guía ven a aquellos que nunca se comprometieron, las almas de aquellos que jamás hicieron algo bueno o malo (entre ellos, Dante reconoce a Celestino V, un papa que renunció a su cargo). Con ellos están los exiliados que no tomaron parte en la rebelión de los ángeles. Estas almas no están ni en el Infierno ni fuera de este, pero residen en las orillas del Aqueronte.

Primer circulo (El limbo)

Tras franquear el vestíbulo, Dante y Virgilio llegan a la barca que les permitirá cruzar el Aqueronte y llegar al infierno propiamente dicho. Quien conduce la embarcación es Caronte, quien, al saber que Dante procede del mundo de los vivos, se niega a dejarlo pasar desencadenando una lucha en la que el Caronte finalmente tiene que aceptar tras perder la cabeza. Esta parte antes de entrar al infierno se conoce como el Limbo, dividido en dos partes: la parte en la que viven todos aquellos condenados que no se encuentran bajo ningún tormento pero que carecen de fe y no pueden ver a dios. En la otra parte se encuentra el Rey Minos, quien está juzgando a los demás condenados para decidir en cuál de los círculos inferiores deberá quedar recluido. En ese momento Dante recuerda la promesa que hizo a Beatriz de no sucumbir a los pecados de la carne, encaminándose posteriormente hacia el segundo circulo tras derrotar a Minos.

Segundo circulo (Lujuria)

Tras descender al segundo circulo encontramos a aquellos que han sucumbido ante el pecado de la lujuria, aquellos que el deseo nubló el juicio y la razón. Como castigo estos condenados se encuentran destinados a vagar en soledad, sin poder soportar los deseos carnales. Otros recibirán el castigo del azote del viento, y otros serán los amantes que pueden verse, pero no pueden tocarse. Aquellos azotados por los vientos son condenados a girar constantemente alrededor de la torre a la cual debe de acceder Dante. Aquellos que habitan en la torre están condenados por Cleopatra, la primera a la que tendremos que vencer para poder continuar subiendo la torre. Lo deseos de Cleopatra por Marco Antonio costaron una civilización entera y al llegar al final de la torre Dante recordara su infidelidad hacia Beatriz… teniendo que enfrentarse al pecado de la lujuria para descender al tercer circulo.

Tercer circulo (Gula)

Tras descender al tercer circulo en el encontramos a quienes sucumbieron al pecado de la Gula, el hecho de comer y engullir, devorados por Cerbero y demonios que vomitan y defecan. En el juego cabe destacar que este Cerbero no es un perro si no un gusano con tres cabezas y grandes dientes. Dante debe luchar y derrotar a este ser para así poderse abrirse paso hacia el siguiente circulo. En este círculo Dante recuerda su niñez, una niñez atormentada por un padre que engullía constantemente mientras bebía vino y las mujeres se dejaban llevar por el deseo carnal. En este punto es cuando Lucifer le revela a Dante que el asesino de Beatriz y su padre es el esposo de la prisionera con la que dante sucumbió a los deseos de la lujuria. 

Cuarto circulo (Avaricia)

Tras las visiones de su infancia y completar el tercer circulo Dante hace frente a aquellos que en vida se dejaron llevar por los objetos materiales, entre los cuales se encuentra su propio padre. El castigo de estos es el baño en oro ardiente y la perdida posterior de la cabeza. Este es el círculo más largo, donde finalmente y tras su recorrido Dante deberá enfrentarse a su propio padre, quien se ha convertido en un ser de aspecto grotesco, gordo y lleno de joyas. Dante recuerda de nuevo como su padre se beneficiaba de los demás con la excusa de alimentar a su propia familia. Tras enfrentarse y ganar a su propio padre este, gracias a Dante, obtiene la absolución al cielo.

Quinto circulo (Ira)

El quinto circulo es, a diferencia del cuarto, uno de los más cortos de la historia. Un lugar donde llacen aquellos que se dejaron condenar por la furia y dejaron que la rabia les cegara. En este círculo aquellos condenados sufren revolcándose en la laguna de Estigia, mientras que Dante debe de continuar con su camino, haciéndose esta vez con el control de Flegias. Durante el circulo Dante recuerda el pecado relacionado con la ira que cometió cuando durante las cruzadas el Rey negoció con los sarracenos. La ira consumió a Dante, que ahora atraviesa el quinto círculo del infierno para encontrarse con una Beatriz que ha decidido convertirse en la reina del infierno dada su traición.

Sexto circulo (Herejía)

Con Flegias bajo su control, Dante puede atravesar las puertas de Dite para así comenzar con el descenso al sexto circulo, el de la herejía, donde descansan todos los condenados que alguna vez han realizado algún acto contra la religión tales como el vudú, las sectas o ignorar los sacramentos de Dios. Este es también uno de los círculos más cortos junto con el de la Ira. Aquí, todos ellos sufren el fuego eterno, colgados de sus propias tumbas. Aquí los herejes sufren crucificados mientras Dante, guiado por Virgilio atraviesa el circulo para encontrarse con uno de los más largos también.

Séptimo circulo (Violencia)

Este es el séptimo circulo, dividido a su vez en tres recintos; violencia a la persona ajena, violencia a sí mismo y violencia contra Dios. Dante deberá pasar por los tres recintos para así poder seguir descendiendo y buscar el alma de Beatriz. En el primero de los recintos, aguardan aquellos condenados que son abrasados por un río de sangre hirviendo, un río que Dante deberá de atravesar derrotando a sus enemigos.

En el segundo recinto, El bosque de los sucios, encontramos aquellos que atentaron contra su propia vida, aquellos que han sucumbido a la violencia contra uno mismo. En este segundo recinto Dante se encuentra con su madre quien al pertenecer a ese recinto no tiene alma, ya que no debe de poseer algo que ella misma se negó. Entonces, Dante descubre el verdadero motivo de la muerte de su madre y decide absolverla mientras esta le pide misericordia.

Dante llega entonces al tercer recinto, aquel que usa la violencia contra Dios, y es condenado a sumergirse en las calurosas arenas del desierto, donde Dante encuentra a su amigo Francesco, el hermano de Beatriz, además del alma de todos sus compañeros cruzados. Entonces Dante recuerda todo el daño que hizo y pese que su amigo está dominado por el odio hacia Dante, tras derrotarlo es liberado del infierno.

Octavo circulo (Fraude)

El viaje de Dante se acerca poco a poco al final, pero antes debe de pasar por el octavo circulo, aquel que contiene el pecado del Fraude, sin duda el más odiado por Dios. Todo el que cae en este círculo es cubierto por una eterna oscuridad de la que no van a poder salir nunca, sin tan siquiera la luz. En este círculo Beatriz aguarda a Dante, la cual le obligara a pasar por los diez charcos del fraude, afrontando así diversas pruebas para finalmente poder llegar al final del círculo.

Este círculo tiene varias partes: rufianes y seductores, adulación, simonía, hechiceros, estafadores, hipocresía, ladrones, malos consejeros, sembradores de la discordia y falsificadores. Tras esperar estos diez desafíos Dante se encontrará con Beatriz, dándose finalmente por vencido y reconociendo que ese es su lugar. Al dejar caer la cruz de Beatriz, esta es absuelta y conducida fuera del infierno mientras Dante afronta su prueba final en el noveno circulo.

A continuación puedes acceder a los diez charcos del Fraude para ver las misiones que estos te plantean aquí.

Noveno circulo (Traición)

Con diferencia el circulo más corto, uno en el que simplemente tendremos que descender y enfrentarnos a unos cuantos enemigos teniendo cuidado de no caer y resbalar ya que la zona es completamente de hielo. En este último circulo Dante ya a hecho frente a todos sus pecados, menos al peor, el de la traición. Dante traicionó al hermano de Beatriz y lo mataron en su lugar. Finalmente, tras ver como un Arcángel se lleva a Beatriz, Dante se dispone a ir en busca de la única salida. En este círculo aquellos que aguardan por la gélida y fría traición, enfrentándose a su castigo siendo congelado en el lago de Cocito.

Tras descender al pozo de Judeca aparece Lucifer quien le desvela que Beatriz era un señuelo para atraerle y liberarse de la prisión en la que fue condenado por su traición a Dios. Tras el enfrentamiento, Dante libera las almas de aquellos que ha cosechado durante todo su viaje para encarcelar al Diablo definitivamente, acto seguido las almas escapan del Infierno. Con esto, Dante logra finalmente redimirse y llega al Purgatorio, el camino del perdón, donde le espera su amada Beatriz.

Al cruzar el túnel y ver el monte Purgatorio, Dante se arranca la cruz de tela cosida en su pecho, indicando así que se perdona a sí mismo de sus pecados. Entonces, el trozo de tela se transforma en una serpiente, y de fondo se oye la malévola risa de Lucifer.